Pubertad y adolescencia

El paso de la infancia a la adolescencia está acompañado de numerosos cambios en el cuerpo y en el comportamiento psicológico.

Desarrollo de la pubertad

Durante este periodo, denominado pubertad, los órganos reproductores, que estaban formados ya desde el nacimiento, se vuelven funcionales (testículos, escroto, pene, próstata, etc.). Estos son los caracteres sexuales primarios.

El cuerpo también adquiere poco a poco las formas del individuo adulto (hombros, voz más grave, vello púbico, desarrollo muscular, etc). Estos son los caracteres sexuales secundarios.

Por último, están los signos de madurez sexual, que marcan el inicio de la capacidad reproductora (eyaculación, menstruación, ovulación, etc).

-Influencias hormonales
El hipotálamo marca el inicio de la pubertad al actuar sobre la hipófisis del cerebro y estimularle a producir gonadotropinas. Estas hormonas, por medio de la sangre, llegan a los testículos y a los ovarios y los estimulan a iniciar su desarrollo y funcionamiento.

Los testículos comienzan a segregar testosterona, principal hormona sexual masculina, responsable de la aparición de los caracteres masculinos secundarios y de la maduración de los espermatozoides.

Los ovarios producen estrógenos y progesterona, hormonas sexuales femeninas que favorecen el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios de la mujer y la formación de óvulos.

Evolución de un varón

En adolescentes varones (14 años)

• Agrandamiento testicular y escrotal
• Aparición de vello púbico
• Aparición de vello axilar y facial
• Cambio de voz (agrandamiento laríngeo)
• Aumento de grasitud en la piel (acné)
• Estirón 
• Primeras eyaculaciones

En adolescentes mujeres (14 años)

Evolución de una mujer

• Aparición del botón mamario
• Crecimiento de vello púbico
• Crecimiento estatural
• Aumento de peso y de grasa corporal
• Crecimiento de los labios vaginales y mucosa se torna más húmeda
• Agrandamiento de los ovarios